La Operación Telémaco está basada en una sólida carga probatoria recopilada por Vicus, la innovadora herramienta desarrollada por la Guardia Civil para perseguir pedófilos. El Caso 317 de 2010, abierto gracias al reporte del Equipo de Investigación de Delitos Tecnológicos (E.D.I.T.E.), guarda muchos detalles. La historia sigue de la siguiente manera.
Por medio de Vicus, en mayo de 2010 y debido al incremento en el tráfico de archivos con pornografía infantil en la red, el E.D.I.T.E. realizó una búsqueda de oficio que arrojó 4.801 identificadores hash relacionados archivos videográficos que contenían pornografía con menores de edad. Los valores hash son combinaciones de números y letras que de forma única identifican ficheros, son prácticamente huellas digitales.
Después de un proceso de filtrado, surgieron 42.806 usuarios relacionados con la tenencia y descarga de dichos archivos, de los cuales 1.185 presentaron coincidencias con los ficheros encontrados. Son números astronómicos de individuos accediendo y compartiendo sin límites contenidos con pornografía con menores de edad en un rango de tiempo muy reducido.
El trabajo de E.D.I.T.E. y Vicus es loable y altamente técnico pues, después de filtrar los resultados por jurisdicción, identificaron que eran 49 los usuarios en España, de los cuales 25 presentaban coincidencias con 16 archivos. Una investigación que inició con 42.801 usuarios o sospechosos a nivel mundial, en cuestión de horas y gracias a la tecnología logró ser reducida a 25 involucrados. Una pesadilla para los pedófilos y un trabajo que debe ser ampliamente reconocido a las autoridades y el grupo de civiles que desarrollaron la herramienta investigativa.
El 8 de junio de 2010, el E.D.I.T.E. realizó el atestado No. 36609111-10-000046 en el que se muestra que los 25 usuarios españoles respondían a los nombres de usuarios: otidale, Jotajeje, ANFEBA, Quino, Allã¡ voy Pascualet y carlos m; junto a los que fueron identificados como protocolo de direcciones “http”.
Adicional a ello, los investigadores lograron hacerse de las direcciones IP de los usuarios, fechas exactas y el número de sesiones en las que descargaron los archivos. Una dirección IP (o Internet Protocol), es un número que identifica, de manera única y jerárquica, a una interfaz en red de un dispositivo, computadora, tableta, portátil o smartphone que utilice la red. Este sería un elemento vital dentro de la investigación que permitiría identificar a las personas reales detrás de los usuarios.
Con respecto al contenido de los ficheros identificados, Vicus cuenta con la capacidad de filtrar videos con contenido pornográfico, en este caso protagonizado por menores de edad, incluso, como lo menciona el citado reporte de investigación de E.D.I.T.E. de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Pontevedra, con menores de 8 años “conteniendo sexo explícito, algunos de ellos con extrema violencia y degradación del menor”. Ver Reporte de investigación (2010-06-08 GC Atestado 366609111-10-46)
El nombre de los archivos deja muy claro el contenido de los mismos. El Anexo II del aludido reporte, referente a los datos filtrados por usuarios españoles, expone los retorcidos e insaciables deseos de los usuarios. Ver Reporte de investigación (2010-06-08 GC Atestado Anexo II)
Una vez identificadas las direcciones IP y los usuarios con los respectivos valores hash, el siguiente paso en la investigación fue tomado por el Capitán Joaquín Losada, líder de la unidad E.D.I.T.E., quien solicitó al Juzgado No. 3 en Cangas autorizar requerimientos a los proveedores de internet para conocer los domicilios asociados a los titulares del servicio de internet realcionadas con las direcciones IP de los usuarios identificados por la investigación. Los implicados estaban muy cerca de ser determinados, pues las autoridades les pisaba los talones. Las repuestas de los proveedores de internet brindarían, en principio, conocer a nombre de quién estaba el servicio de internet y su domicilio, desde el cual se generaba la dirección IP.
Para desgracia del círculo de pedófilos y por el bien de decenas de menores de edad vulnerados, el Juzgado No. 3 autorizó la solitud de información a las compañías R Cable y Telecomunicaciones Galicia S.A., Cableuropa S.A.U., Techauna-Auna, Vodafone España S.A.U., Video Cadena Sur-Net, Telefónica España S.A.U., Telefónica Móviles España, Jazztel-Jazz Telecom S.A., Iberbanda S.A., Euskaltel y Cableuropa S.A.
Las autoridades instaron a las compañías a que en menos de 72 horas facilitaran toda la información necesaria al E.D.I.T.E. y las compañías cumplieron entregando los nombres detrás de las direcciones IP. Ver Auto (2010-06-08 Juzgado No 3 Auto for ISPs)
Las solicitudes de información a los proveedores de servicios de internet fue un paso esencial en la investigación, pues permitió destapar la olla podrida e impulsó la Operación Telémaco con nombres, números de identificación y direcciones exactas. Un tema técnico tan preciso como irrefutable.
Los implicados, creían las autoridades, no tenían escapatoria. Sin embargo, ¿Con qué se encontraron las autoridades y quiénes eran los españoles que buscaban en los menores satisfacer sus criminales deseos? Más aún, ¿qué papel juega el fiscal anticorrupción José Grinda González en todo este depravado panorama? Y ¿por qué los usuarios se centraban en la llamada categoría “Lolitas”? como lo expone el nombre de los archivos y la cual involucra a niñas, menores de edad, teniendo sexo con adultos mayores.
Los resultados de la investigación fueron llevando a las autoridades a Jotajeje, a sus retorcidos deseos sexuales y al señor fiscal anticorrupción José Grinda González a ser la persona detrás de la IP que utilizaba ese usuario para buscar lolitas. Pese a que esos documentos oficiales obtenidos guardan secretos perturbadores e irrefutables, aún no pasa nada.